• 01/11/2022
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Educar para la vida en atención plena: Un alumnado más presente, menos disperso y desconectado

Alfredo González es el creador del espacio Faro Estudio de Mindfulness, pero también es docente. En su ponencia ‘Educar para la vida en atención plena’ explica los beneficios de la práctica meditativa en una época en la que el ser humano vive desconectado de sí mismo, secuestrado por un patrón de pensamiento y conductas reactivas.

González argumenta que en la actualidad, vivimos de forma autómata, con el piloto automático, enfocados a patrones de consecución de resultados, también los niños y niñas en la escuela, orientados a aprobar exámenes y obtener su titulación. Es habitual que las personas definan su vida como “aquí seguimos en la batalla”. “Un niño, un adolescente, un adulto, está sometido a un gran desgaste increíble cuando resume su vida como una batalla”, explica.

El mindfulness es una práctica que ayuda al ser humano “a vivir desde el único momento que existe que es el momento presente, adquiere la habilidad de saborear la vida, eligiendo y desechando lo que no genera bienestar”, relata Alfredo González.

Explica cómo el alumnado está cada vez más ausente y menos presente, con la atención dispersa, lo que dificulta su proceso de aprendizaje y a la vez tiene consecuencias nefastas para la salud. “La atención plena nos devuelve a la conexión con nuestro cuerpo, sus necesidades y sus límites”, defiende. En este sentido sostiene que los estándares educativos no han adaptados sus sistemas a esta realidad tan diferente. “La situación actual nos está invitando a un cambio de paradigma radical”, argumentó.

Las estadísticas sobre patologías de salud mental e incluso suicidios en la población infanto juvenil son a juicio de Alfredro González “una señala de alarma que nos obliga a actuar con rapidez”. “Nos obligan a ofrecer un paradigma educativo en el que se cuiden más las necesidades emocionales y socioafectivas”, explicó.

La práctica de la atención plena deriva en que cuando el ser humano pasa por acontecimientos desagradables, es capaz de “abrirse a lo que realmente es, sin condiciones, asumiendo que no se puede cambiar”. “Eso permitirá a su vez ver que hay oportunidades incluso cuando todo se trastoca”.